Arauco, Lunes 2 de Octubre de 2017 a las 8:09

El liderazgo educativo, clave en la transformación escolar

Como Fundación soñamos con un país en el que todos los niños puedan desplegar su máximo potencial y creemos que para lograrlo los profesores son actores fundamentales. Es por ello que debemos preguntarnos permanentemente ¿Qué factores ayudarían a potenciar su importante labor y así fortalecer la educación de nuestro país? A  juicio del reconocido investigador en educación Kenneth Leithwood, no existe ningún caso documentado sobre alguna escuela que haya logrado dar un vuelco en la trayectoria de resultados de sus estudiantes sin que exista un liderazgo talentoso desde las esferas directivas y plana educativa de cada establecimiento.

 

En estos 28 años hemos acompañado  y apoyado escuelas en más de 34 comunas de Maule, Bío Bío y Los Ríos, y hemos evidenciado que los líderes educativos exitosos o talentosos, que promueven mejores aprendizajes de sus estudiantes, tienen ciertas características comunes que nos pueden dar pistas de qué fortalecer. Quisiera relevar 5 de ellas:

 

Ellos creen y confían en el trabajo que se realiza día a día en sus escuelas: saben que hay múltiples factores de contexto y estructurales que influyen y afectan el aprendizaje, pero saben también que ellos pueden marcar una diferencia.

Tienen altas expectativas hacia sus estudiantes y su futuro: creen que todos los niños y niñas de sus escuelas pueden aprender y que ellos deben buscar formas de apoyarlos, confiando así en las capacidades de sus estudiantes y responsabilizándose por su influencia.

Sostienen y apoyan las capacidades de sus docentes y de los diferentes profesionales de la comunidad educativa: saben que para lograr que todos aprendan, el rol de los profesores es clave. Por esto abordan de manera explícita su formación permanente y la identificación de buenas prácticas, potenciando el trabajo colaborativo y la mejora continua.

Creen que ellos tienen un rol en lo pedagógico: están permanentemente presentes, indagando y conversando respecto de los aprendizajes de sus alumnos, aprendiendo junto a su equipo,  estableciendo vínculos con la comunidad.

Se esfuerzan por construir coherencia entre la visión de futuro y la operación cotidiana, lo que implica soñar en grande e ir paso a paso construyendo las condiciones para lograrlo.

Todo esto  moviliza y da energía a la vida de sus escuelas.

 

Somos conscientes que no hay recetas ni modelos externos o internos infalibles, ya que las circunstancias de cada comuna y escuela son diferentes. Estamos convencidos que cada escuela y cada comuna tienen esa capacidad de transformar su realidad y que el liderazgo educativo es una palanca imprescindible para lograr la mejora escolar por lo que debemos fortalecerlo.

 

Isidora Recart

Gerente Fundación Educacional Arauco