Lunes 1 de Agosto de 2011 a las 22:39

“Drogas, balaceras y amenazas”. La alarmante realidad de la Cardenal

El temor que infunden los delincuentes a los vecinos de la población
Cardenal Silva Henríquez es menor que la impotencia que les produce a los
pobladores no poder tomar la justicia por sus propias manos, es que
los hechos delictuales tienen chatas a las más de 300 familias de la parte
sur poniente de Cañete.

Durante los últimos días las balaceras han sembrado el terror en el
vecindario, y no es para menos, si uno de esos tiros van a parar al interior
de las casas.  “Nuestro sector era muy tranquilo, pero eso terminó con la
venta de drogas, puesto que estas prácticas han traído las peleas entre
traficantes (…) todo se inició tras una mexicana o quitada de drogas,
ahora los involucrados se agarran dónde sea”, señaló una preocupada dueña de
casa que contó este drama y que prefirió el anonimato por
temor a represalias.  Esta mujer fue una de las tantas testigos de los
tiroteos del fin de semana.

La preocupación es tal que ni siquiera la acción de la justicia ha logrado
mermar la furia de los malhechores, que literalmente se han tomado las
calles.  “No sirve de nada denunciar, si los Carabineros los detienen y al
rato están libres y amedrentando a todos.  Lo peor es que andan armados y
vienen de la población del lado (…) todos saben quienes son, pero nadie
hace nada, y resulta que ahora la gente honesta tiene que estar tras las
rejas de sus casas sin poder salir”, contó con impotencia R.C.M., hombre de
38 años, que ha presenciado enfrentamientos entre bandas rivales.

Frente a esta situación la presidenta de la junta de vecinos, unas de las
pocas personas que se atreve a dar la cara, hizo un llamado a las
autoridades ha actuar con firmeza antes de que sea tarde.  “No esperemos que
una bala loca mate a un inocente para actuar.  Aunque tememos por las
represalias, creemos que es hora de ponerle atajo a este problema, pero
necesitamos la ayuda de la autoridad, sin ellos, no es posible ganarle
terreno a estos pandilleros que siembran el terror entre nuestros vecinos”,
señaló María Iturra, presidenta de JJVV Cardenal Silva Henríquez Dos.

“Queremos tranquilidad en nuestro barrio”, exigió la dirigenta, ya que por
el momento, advirtió, los delincuentes están ganando la pelea.  Hace casi
un casi un mes que el Plan Cuadrante se instaló en la ciudad histórica, por
lo que los vecinos esperan que esta iniciativa sea capaz de controlar a los
patos malos que se dedican a delinquir y hacer pasar malos ratos a los
habitantes de esta parte de cañete.