Viernes 25 de Noviembre de 2011 a las 1:50

Dos camiones quemados en nuevo ataque incendiario en Antiquina

La acción de encapuchados dejó a dos camiones forestales quemados en la localidad de Alto Antiquina, sector distante a unos 28 kilómetros al sur de Cañete.  El nuevo atentado incendiario se registró a eso de las 20:00 hrs de ayer jueves e involucró a dos transportes de carga que le prestan servicios a la empresa Forestal Volterra.  Uno de los móviles era remolcado tras haber sufrido un desperfecto mecánico en horas de la tarde, hecho que fue aprovechado por los tres encapuchados que a punta de escopetas obligaron a abandonar los camiones y luego les prendieron fuego.

Pablo Riquelme, uno de los choferes que vivió este ataque contó que “al enfrentar una subida nos encontramos con árboles atravesados en la ruta y que de pronto aparecieron tres sujetos armados y nos conminaron a descender y lanzarnos al suelo para evitar sus rostros, eso sí, llevaban capuchas (…) nos quitaron los celulares, rociaron los vehículos con combustible, le prendieron fuego y nos dijeron que corriéramos.  Sentimos como dos tiros por la espalda”.

Este conductor junto a un segundo identificado como Alex Torres debieron recorrer más de tres kilómetros para buscar ayuda.  “Nos demoramos como 45 minutos hasta llegar a la escuela y ahí recién pudimos dar aviso a Carabineros y ellos se demoraron casi una hora en llegar.  Eran tres sujetos encapuchados que dijeron que la cuestión no era contra nosotros sino con las forestales, de todos modos, igual nosotros fuimos los que pasamos este tremendo susto”, comentó este conductor.

La fiscalía instruyó a personal de la BIPE y LACRIM de la Policía de Investigaciones para indagar antecedentes que permitan aclarar y dar con los responsables de este nuevo ataque incendiario ocurrido durante este año en la parte sur de la provincia de Arauco.  El nuevo hecho de violencia ocurrido en la zona del conflicto Mapuche deja entrever que la Coordinadora Arauco Malleco se habría re-articulado poniendo en jaque a las policías.

 

D. Roa