Jueves 22 de Mayo de 2014 a las 0:10

¿Y qué pasó con las ambulancias destinadas a Cañete?

 

A propósito de la falta de ambulancias en Cañete, fuimos a nuestros archivos de prensa y nos encontramos con el siguiente titular, “CONSEJEROS APROBARON 6 NUEVAS AMBULANCIAS PARA LA PROVINCIA DE ARAUCO”, con fecha 9 de mayo del 2013.

El detalle de la nota dice que, “de las 6 ambulancias, 4 se destinarán para la comuna de Cañete siendo una avanzada y tres convencionales. Lebu tendrá una y Contulmo otra”….

Link de la noticia: http://www.araucotv.cl/09-05-2013/7936/

En enero del 2012, la directora del Servicio de Salud Arauco, entregó al hospital de Cañete dos ambulancias nuevas, un SAMU básico y una convencional. Ambas, actualmente en servicio.

Link de la noticia: http://www.araucotv.cl/08-01-2012/2915/

Pero si en enero del 2012 se entregaron 2 ambulancias, que sumadas a las 2 que habían, hicieron 4 y en mayo del 2013 se anunciaron la entrega de 4 más, a la fecha el hospital de Cañete debería contar con 8 y no con 3 como ocurre actualmente, entonces ¿donde están las 4 ambulancias anunciadas por los consejeros regionales y por la gobernadora de la época? ¿Fue solo un anuncio de campaña o se las llevaron los ovnis?

Fuentes de AraucoTV, señalan que esas 4 ambulancias fueron reasignadas a otros hospitales vecinos, porque administrativos del centro asistencial cañetino no realizaron los trámites correspondientes para recibirlas y terminaron en otras manos.

Un hecho lamentable, pues ya se hace común que las ambulancias existentes, 3 de emergencia y una para traslados fijos, no logran cubrir la cantidad de emergencias que se presentan.

Los hechos lo demuestran. Este martes, un hombre atropellado por un vehículo debió ser trasladado por bomberos al hospital, luego de permanecer tendido en la vereda 20 minutos y la ambulancia nunca llegó. Se supo que a esa hora, dos de ellas trasladaban pacientes a Concepción y la tercera atendía otra emergencia en Antiquina.

Habrá que investigar que pasó realmente con esas 4 ambulancias anunciadas por las autoridades de la época, las que fueron pensadas para Cañete, pero que nunca llegaron.

 

 

Héctor Gubelin