Región, Lunes 1 de Marzo de 2021 a las 16:15

SAG INTENSIFICA INSPECCIONES DE NAVES PROVENIENTES DE ÁREAS DE RIESGO DE LYMANTRIA DISPAR

·         La polilla gitana es considerada una de las plagas defoliadoras más importantes a nivel mundial, ya que puede alimentarse de más de 500 tipos de árboles y arbustos forestales, frutales y ornamentales, siendo una de las principales vías de diseminación las naves de transporte marítimo.

Talcahuano, 01 de marzo de 2021.

Producto de la reciente intercepción de masas de huevos de Lymantria dispar, también conocida como polilla gitana, en la cubierta de una nave proveniente de la zona de riesgo de esta plaga forestal, funcionarios del Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) de Biobío intensificaron las inspecciones en los puertos de la región con el fin de evitar su ingreso a nuestro país.

Al respecto, el Jefe de la Oficina del SAG Talcahuano, José Bravo Roznowski, destacó que “esta es una plaga de alta peligrosidad para nuestro país, es considerado uno de los insectos  defoliadores más importantes a nivel mundial, ya que puede alimentarse de más de 500 especies de árboles y arbustos forestales, frutales y ornamentales y una de las vías de diseminación es a través de las naves de transporte marítimo, por lo que desde el año 2013 el Servicio reforzó la fiscalización de los buques provenientes del sudeste asiático, área de riesgo de la plaga, lo que nos permite interceptar en forma oportuna su presencia”.

Agregó que esta especie de polilla aprovecha las estructuras de los buques para su diseminación. Las hembras se ven atraídas por las luces en las cubiertas de los barcos durante la noche y ponen sus huevos sobre sus estructuras, los que pueden permanecer vivos unos 2 años, emergiendo larvas que son transportadas por el viento, gracias a una estructura de seda que producen para ese efecto, llegando a su hospedero para alimentarse y reproducirse.

De acuerdo a los protocolos de fiscalización definidos por el SAG, cada vez que una nave ingresa a nuestro país, las agencias navieras deben informar su arribo junto con el listado de recalada en puertos de los últimos 24 meses, lo que permite verificar el riesgo de cada buque, ya que existe una categorización por país definida por la presencia de la plaga, estableciéndose que las naves de riesgo deben venir amparadas por un Certificado Oficial emitido en el último puerto de permanencia o zarpe de la nave localizado en áreas con presencia de la plaga, el cual debe acreditar que la nave se encuentra libre de Lymantria dispar.

“Las naves que llegan a alguno de los puertos de la región deben presentar el certificado oficial de libre de la plaga, posteriormente nuestros funcionarios realizan una exhaustiva revisión de las cubiertas, la que debe ser con luz natural, ya que la plaga se aloja en las paredes de las estructuras de la nave y en diferentes lugares de la cubierta en donde la hembra puede colocar sus huevos”, señaló Bravo

En este sentido, indicó que anualmente recalan como primer puerto nacional 350 buques provenientes del extranjero, de los cuales más del 70% lo hace desde puertos de la costa del pacífico de Asia, los cuales son inspeccionados previo a su ingreso a Chile.

Asimismo, el profesional del SAG de Talcahuano detalló que desde enero de 2014 han recalado más de mil 500 barcos provenientes de Asia en los puertos de la región, interceptándose en 12 oportunidades esta plaga, adoptando las medidas definidas por el SAG para evitar su ingreso al territorio nacional. “En caso de detectar la presencia de masas de huevos, la labor de fiscalización continúa con la remoción de éstas y la supervisión de la aplicación de un tratamiento de asperjado con un plaguicida autorizado al buque completo. Luego se realiza una nueva inspección para verificar que éste se encuentra libre de la plaga”, dijo.

La Lymantria dispar está catalogada como plaga cuarentenaria no presente en Chile y a partir del 30 de julio de 2013 el SAG estableció requisitos fitosanitarios específicos para las naves de transporte marítimo (naves de carga, pesqueras, de turismo, científicas y de pasajeros) que hayan zarpado o permanecido en áreas con presencia de la plaga.

Además, el SAG cuenta con una red de vigilancia, a través de trampas de feromona instaladas en los puertos de la región y en zonas aledañas a ellos, las cuales son revisadas por funcionarios del Servicio, con el fin de detectar en forma oportuna su presencia.