Para el segundo semestre del año se espera que el nuevo hospital intercultural Kallvu Llanka de Cañete quede cien por ciento operativo, a lo menos, así lo anunció el ministro de Salud, Jaime Mañalich, que este viernes visitó las dependencias de este centro asistencial de salud que atenderá las necesidades de más de 60 mil usuarios del cono sur de la provincia de Arauco.

“Esperamos que en agosto podamos inaugurar junto al presidente Piñera el nuevo hospital para Cañete”, precisó el secretario de estado que ayer por la tarde se trasladó a Cañete para recorrer las instalaciones del nuevo recinto hospitalario que desde octubre del año pasado abrió sus puertas para la atención primaria, restando las áreas de urgencias, hospitalización y administrativas.

PUNTO DE PRENSA DEL MINISTRO

Este anuncio fue bien recibido, sin embargo, hay voces que ponen en duda que así sea.  El diputado Manuel Monsalve es uno de ellos y argumentó que “hemos vivido durante estos tres años un show de versiones, en cuanto a cuando se abre, cuando se pone en marcha o cuando se repara (…) las emprecisiones han sido el sello de esta gestión, por eso, ponemos en duda estos anuncios”.

También el consejo de Lonkos de la povincia de Arauco criticó el proceso de puesta en marcha de este hospital intercultural.  “La gente que nosotros hemos elegido para hacer de nexos entre nuestra cultura y la occidental ha sido despedida y por eso afirmamos que el servicio de salud no tiene equipos para trabajar la interculturalidad (…) este es un tropiezo para el proceso”, apuntó Daniel Leviqueo, lonko de la zona de Elicura.

Los gremios de la salud también se reunieron con el ministro y le dieron a conocer sus diferencias acerca de la forma como se ha puesto en marcha el nuevo hospital.    “No había necesidad técnica ni real para estar trabajando en dos hospitales, sólo obedeció a un momento político (…) todavía no se ven los trabajos de refundación de los edificios dañados por el terremoto y el ministro dijo que en agosto nos podríamos cambiar, sólo hay un manto de dudas”, afirmó Sheila Mora, dirigenta de la Fenpruss.