Continúa desaparecido Marcelo Reyes Carvajal (49), funcionario (conductor) del Servicio de Salud Arauco, a pesar del amplio operativo desplegado este domingo en buena parte de la provincia de Arauco, a poco más de 48 horas desde que se le vio por última vez.
A los esfuerzos de la PDI y el GOPE de Carabineros, se les sumaron unidades bomberiles de las comunas de Lebu, Los Ãlamos, Cañete y Contulmo; además de personal, vehÃculos y ambulancia de los departamentos de  salud de Los Ãlamos y Contulmo y nueve camionetas del SSA.
Armando DomÃnguez, sub director administrativo del Servicio informó que los trabajos de rastreo se concentraron en sectores cordilleranos de Contulmo y Cañete por las señales que el GPS del conductor habrÃa arrojado, “en primera instancia recibimos algunas señales georeferenciales que indicarÃan que el celular se encontraba en un sector denominado Lote B, en Contulmo, pero no hayamos nada”. Agregó que una avioneta particular realizó sobrevuelos por el área , también  sin resultados.
Más tarde se recibieron señales desde lo alto de Cayucupil, lo que hacÃa suponer que Marcelo Reyes, que desapareció junto con el vehÃculo que tiene a su cargo, (Hyundai Tucson color gris) se estarÃa desplazando por distintitos caminos rurales. Una unidad de la 5ta compañÃa de Bomberos de la mencionada localidad subió hasta lo alto de la cordillera sin que tuvieran contacto con él.
DATOS DE LA DESAPARICIÓN:
Los antecedentes que se manejan es que el dÃa viernes 26 de julio, luego de haber terminado su jornada laboral, Marcelo Reyes Carvajal salió de su casa en Lebu a eso de las 17:15 horas a comprar pan. A los pocos minutos, llegó hasta el estacionamiento del Servicio de Salud, allà sacó la Tucson, se despidió de dos colegas y tomó rumbo hacia la subida Camarones para salir de la capital provincial.
Luego, Marcelo se traslada a Cañete y a eso de las 18:00 horas entra solo a un local de comida rápida que el frecuenta  ubicado en el centro de la ciudad. Sin demostrar nada extraño, saluda al dueño amablemente como siempre y después le pide el número de teléfono del local dejando entrever que podrÃa realizar futuros pedidos de comida, retirándose sin comprar nada. Esa fue la última vez que se le vio.
Este lunes continuarán las tarea de búsqueda en la zona.